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Para
toda transformación de relevancia el lenguaje conserva su
papel protagónico.
El buen
uso del lenguaje nos convierte en hacedores; en los
principales protagonistas de nuestros planes. No puede
desestimarse el rol del lenguaje en proyectos tan cargados
de significado como lo es el de adelgazar y recuperar la
gracia del cuerpo. El uso estratégico de la palabra o del
gesto es algo más que expresarse; se convierte en factor
de cambio, en un acto de creación. El uso estratégico
del lenguaje integrado (verbal y gestual) es una
intervención indiscutible que deja marcas contundentes en
la memoria y en la gama de conductas. El uso estratégico
del lenguaje contribuye a mejorar las pautas y los
patrones mentales involucrados en el proyecto
"adelgazar". La obesidad es el reflejo de una
pauta mental; el producto de patrones mentales combinados
tan perfectamente que parecen reales y lógicos.
Muchas
personas sufren sin necesidad por considerarse obesos, o
por creer que ya es tarde para ellos para cambiar. Estos
conceptos son patrones mentales que lastiman. Patrones
mentales que se pueden cambiar. Mediante el uso
estratégico del lenguaje las personas aprenden que el
hombre es capaz de cambiar las cosas burlando fronteras de
tiempos y de creencias. El buen uso del lenguaje los hace
aptos de nuevo. Con la ayuda del programa de Coaching
para Adelgazar, cada cual va atendiendo a su trabajo
personal; consigue detectar esa conducta que necesita
desarrollar; consigue enseguida desarrollar esa actitud
que necesita desarrollar para afrontar su desafío de
rebajar el excedente de peso naturalmente. Consigue implementar los
factores de cambio relevantes en su caso particular a fin
de ver concretado satisfactoriamente su proyecto de
mejoras y mantenerlo a lo largo de los años.
El
proyecto “adelgazar” no es un asunto menor; merece ser
abordado cuidando el lenguaje de cambio; implementando las
palabras y los giros que den vida al proyecto. El lenguaje
da vida a nuestros patrones mentales que son, a su vez,
los que configuran nuestras acciones. Muchas veces
se inicia una dieta para adelgazar con entusiasmo pero con
patrones mentales disfuncionales; las voces interiores
interrumpen asegurando por ejemplo, que uno es gordo
por naturaleza, que es inútil todo sacrificio, y
terminan arruinándolo todo. Las voces interiores tienen
fuerte incidencia en las conductas, en las visiones de
futuro, en la predisposición general. Ellas suelen
contaminar el clima interior y el proyecto mismo de
adelgazar desplegando una batería de dudas e
impaciencias. Las voces interiores desempeñan un papel
preponderante. Por eso la clave del éxito en todo
proyecto de mejoras radica en insertar aquellas voces
interiores que obrarán como antídoto a la negatividad y
que ayudarán en la construcción de patrones mentales
positivos y edificantes.
La
persona que desconoce el valor de la palabra que
“anima”, quien no utiliza la palabra que da ánimo y
vida a un proyecto, no puede anidarlo en su interior. Su
proyecto se convierte en algo externo, ajeno, temporario
para él. Quien por el contrario, apela al lenguaje
estratégico, va nutriendo su proyecto de mejoras desde su
interior y con su mente; con su lenguaje va tejiendo un
patrón mental positivo y funcional para adelgazar hasta
desterrar definitivamente de su vida el concepto mismo de
obesidad y los sufrimientos mentales o físicos que de él
derivan.
Como
una tela que se va resquebrajando el sobrepeso va
desapareciendo con el impulso de la buena conciencia. Y qué
alegría sobreviene al descubrir por propia experiencia
que la palabra tiene poder sobre los patrones mentales; y
éstos tienen poder sobre las funciones vitales y sobre el
comportamiento general. Impulsando el proyecto con las
emociones positivas que merecen sentirse, el proyecto
cobra vida y el sueño de verse armonioso de nuevo se
convierte en realidad. Las prácticas del Programa
de Coaching para Adelgazar permiten confirmar que para
todo proyecto que involucre además de la idea de
adelgazar, la de mantener el peso normal a lo largo del
tiempo, el lenguaje cumple una función central.
Magia
y fuerza del lenguaje total; verbal y gestual como
promotor de estados emocionales
 Este
programa invita a explorar la magia y la fuerza que tiene
el lenguaje de palabras gestos
y señas para alterar nuestro mundo interior, para
motivarnos y sentir distinto, por ejemplo,
para cambiar nuestro paladar, nuestras
predilecciones, nuestras aversiones y nuestras costumbres
alimenticias. La
magia del lenguaje bien utilizado nos permite ver
expandidas y mejoradas nuestras conductas en el mundo de
afuera. Gracias a los ejercicios sugeridos en el programa,
es posible reconocer por fin hasta qué punto,
las porciones del lenguaje que se ha venido
usando, a menudo han servido para limitar esta magia.
Reconocer estas falencias en el uso inconsciente del
lenguaje alienta a aprender y a aplicar a plena conciencia
los trucos que funcionarán como antídoto a la falla,
a aplicar deliberadamente, el lenguaje estratégico.
Continúa
en "Centros de Ayuda al Obeso"
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